EL VIENTO
(Oniesis Gil y Leandro Camargo)
ONIESIS GIL
Leandro, ven que ya hay plata
de luna en cada celaje
y el viento embarra el paisaje
de fiesta y de serenata.
Caen goteras de nata
del techo del firmamento,
y da la impresión que el viento
prende faros en mis sienes
para ponerme los trenes
de la idea en movimiento.
LEANDRO CAMARGO
El viento cruje en el guano,
retoza con los faroles,
se mete en los caracoles
y se acuesta sobre el llano.
Como un pirata liviano
pasa robando sonidos,
y llena playas de olvidos
como un velero que viaja,
llevando adentro una caja
de músicos escondidos.
ONIESIS GIL
Siempre que el viento pasea
con su arpa entre las flores
como un duende de colores
la mariposa aletea.
En su cúspide moldea
su arquitectura de vuelo,
y eleva sobre el ciruelo
una carretera suave
para que el ala del ave
toque las puertas del cielo.
LEANDRO CAMARGO
Cuando hay viento en temporal
y la lluvia corre arisca,
soplos de fría ventisca
se pegan en el cristal.
Y parece ante el umbral
cuando la mirada subes
que arcángeles y querubes
pusieron ventiladores
en los cuartos interiores
de la casa de las nubes.
ONIESIS GIL
Cuando hay noche tormentosa
y el viento arrastra a un abismo,
papalea un nerviosismo
de sombras en la chismosa.
La madera quejumbrosa
parece que se desgrana,
y afuera el viento se afana
y ruge como si hubiera
suelta en el patio una fiera
arañando la ventana.
LEANDRO CAMARGO
Yo recuerdo al huracán
que azotó mis verdes prados
y hay árboles arrancados
que hoy en mi memoria están.
Su ruido era el de un volcán
con lava fría por dentro,
y lo que vino al encuentro
de lo que fuera la fronda,
era una furia redonda
con un engaño en el centro.
ONIESIS GIL
Con el viento el papalote
desenrolla su madeja
LEANDRO CAMARGO
Y con el viento se aleja,
de las orillas, el bote.
ONIESIS GIL
Con el viento en el mogote
las palmas danzan de prisa
LEANDRO CAMARGO
Con en viento el hombre atiza
hornillas para el consumo
ONIESIS GIL
Y con el viento alza el humo
partículas de ceniza.
LEANDRO CAMARGO
Con el viento se abre el sello
del sobre de la mañana,
ONIESIS GIL
Con el viento la sabana
toma un movimiento bello,
LEANDRO CAMARGO
Con el viento habla el cabello
de la muchacha rural,
ONIESIS GIL
Con el viento matinal
vuelve el recuerdo pasado,
LEANDRO CAMARGO
Y con el viento entornado
alimenta su espiral.
ONIESIS GIL
Con el viento habla el macío,
LEANDRO CAMARGO
Con el viento el agua fluye,
ONIESIS GIL
Con el viento el vapor huye
LEANDRO CAMARGO
Con el viento crece el frío,
ONIESIS GIL
Con el viento ondula el río
como líquida bandera,
LEANDRO CAMARGO
Con el viento por la acera
el topo seco galopa,
ONIESIS GIL
y con el viento la ropa
se seca en la tendedera.
LEANDRO CAMARGO
y el viento somos tú y yo
que en una pronta marea,
ONIESIS GIL
en lo que se va una idea,
otra idea ya llegó.
LEANDRO CAMARGO
Nuestra voz no se inscribió
ni en libros ni en monumentos,
ONIESIS GIL
Pero como un pensamiento
en cada verso dejamos
LEANDRO CAMARGO
Lo que en el viento cantamos
nunca se pierde en el viento.