POESÍA, ¿DÓNDE ESTÁS?

Poesía, ¿dónde estás?
Busco tu helado crisol
en la oscuridad del sol
y en la eternidad fugaz.
Solo fui un cobarde audaz
de sedentarismo atleta,
y he sellado toda grieta
del libelo cancerígeno,
pues “la décima es oxígeno
que alimenta a mi poeta”.*

Poesía, ¿dónde estás?
Busco tu amargo dulzor
en el despreciado amor
de una belicosa paz.
Tu sinceridad mordaz
es la evidencia secreta,
y en mi invisible libreta,
palabras del pensamiento
se transforman en el viento
en popa de mi poeta.

Poesía, ¿dónde estás?
Busco en tu profunda cumbre
la oscuridad de tu lumbre
y tu suavidad rapaz.
La amargura de tu agraz
con mil caricias me agravia,
y en la austral Escandinavia
me incita a esquivarte en choques,
y en estáticos enroques
es de dulce sal mi labia.

Poesía, ¿dónde estás?
¿Dentro de qué anciano niño
vive tu letal cariño
estérilmente eficaz?
Me haces libre en Alcatraz
con tu enfermante salud,
y tu profunda altitud
ignorantemente sabia,
le da una serena rabia
a mi anciana juventud.

© Rubén Sada. 24/06/2023.

(*) Esta expresión fue acuñada por el poeta Ramón Espino Valdéz, el día 11/01/2019.

OXÍMORON: Figura retórica de pensamiento que consiste en complementar una palabra con otra que tiene un significado contradictorio u opuesto.