ES UN DON SER ESCRITOR
En
el mar del pensamiento
donde navega una pena,
transporto una barca llena
de las ideas del viento.
Las musas del sentimiento
me acompañan a estribor,
y con un timón de amor
puedo llegar a la orilla
cuyo premio maravilla
*es un don: Ser escritor.*
Encuentro
el sol y la arena
al otear el horizonte,
y un arpegio de sinsonte
en mis oídos resuena.
Mientras pienso en la sirena
que me brindó su candor,
me regala el estertor
y una meta soñadora,
que me dice a toda hora:
*Es un don ser escritor.*
Me
saluda una palmera
y me da la bienvenida,
me dice “en mi palma anida
la más linda primavera...
La que el corazón espera
matizando del color
de un sol iluminador
que te da la poesía”...
Mientras el coco decía:
*”Es un don ser escritor”.*
Un
hombre que ahí pescaba
al verme extendió su mano,
lo abracé como a un hermano
mientras las redes tiraba.
Con un cantito silbaba
la canción del pescador
y con un rapto de humor
preguntó: “¿Usted escribe?”
Dije: “De eso se vive,
*es un don ser escritor”.*
Se
acercaba una gaviota
a mis manos de poeta,
y yo abría mi maleta
que es de la rima, devota.
Y mil ideas que anota
mi instinto como un motor,
le agregan tanto valor
al fluir intensamente,
dice el eco de mi mente:
*Es un don ser escritor”.*
©
Ana Bonaroti y Rubén Sada. (13/06/2023, día del escritor).-
donde navega una pena,
transporto una barca llena
de las ideas del viento.
Las musas del sentimiento
me acompañan a estribor,
y con un timón de amor
puedo llegar a la orilla
cuyo premio maravilla
*es un don: Ser escritor.*
al otear el horizonte,
y un arpegio de sinsonte
en mis oídos resuena.
Mientras pienso en la sirena
que me brindó su candor,
me regala el estertor
y una meta soñadora,
que me dice a toda hora:
*Es un don ser escritor.*
y me da la bienvenida,
me dice “en mi palma anida
la más linda primavera...
La que el corazón espera
matizando del color
de un sol iluminador
que te da la poesía”...
Mientras el coco decía:
*”Es un don ser escritor”.*
al verme extendió su mano,
lo abracé como a un hermano
mientras las redes tiraba.
Con un cantito silbaba
la canción del pescador
y con un rapto de humor
preguntó: “¿Usted escribe?”
Dije: “De eso se vive,
*es un don ser escritor”.*
a mis manos de poeta,
y yo abría mi maleta
que es de la rima, devota.
Y mil ideas que anota
mi instinto como un motor,
le agregan tanto valor
al fluir intensamente,
dice el eco de mi mente:
*Es un don ser escritor”.*
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