JUSTO ES…

 

Justo es que lo que sube
luego tenga que bajar,
y el ciclo ha de continuar
desde el fango hasta la nube.
Si cuando fui niño anduve
con ojo apuntando al cielo,
hoy que llegué a ser abuelo
martillado en una fragua,
pongo la vista en el agua
y los pies arraigo al suelo.

Justo es que el que trabaja
gane su digno salario
y que sea propietario,
no que gane una migaja.
Si su estudio lo aventaja
tiene que hacerlo valer,
justo es premiar el saber
con mayor categoría,
instrucción, sabiduría
le habrán de reconocer.

Justo es que si un empleado
ha tenido la osadía
de robar mercadería,
el patrón lo haya expulsado.
Pues solo el trabajo honrado
con el sudor como lanza,
termina formando alianza
con el don de la honradez,
que tiene gran validez
y se cotiza en confianza.

Justo es que si un funcionario
latrocinia o despilfarra,
si mete en la caja garra
y roba plata al erario…
Tenga un trato lapidario.
No ha de recibir perdón
ni piedad ni compasión
quien con disfraz de político
hunde al pueblo a un punto crítico
con sus garfios de ladrón.

Justo es que de nuevo el alba
le devuelva el sol al día,
al final de una agonía
de oscuridad a mansalva.
Justo porque al mundo salva
de no morirse de frío,
y en el suelo del estío
la germinación transcurre,
justo así, que todo ocurre
por el bien del sembradío.

Justo es el exacto pago
y es justa la recompensa,
la rueda del karma, inmensa
dará crítica o halago.
Amargo o dulce es el trago
que en la gola se disuelve,
pero al cuerpo entero envuelve
y se debe entender ya
que todo lo que uno da,
del universo le vuelve.

© Rubén Sada. 3/01/2022. Sintagma "Justo es..." impuesto en el grupo Los kamikazes del verso.