NOCHE VERSUS DÍA
NOCHE I (Rubén Sada – Arg)
Convoco a Pietro Igarza, y que en alejandrinos
con sus sonoros trinos me pueda iluminar,
cantando como el día con luces de esperanza,
y que defienda a ultranza a su estrella solar.
con sus sonoros trinos me pueda iluminar,
cantando como el día con luces de esperanza,
y que defienda a ultranza a su estrella solar.
Le pido su permiso porque yo soy la NOCHE,
y voy poniendo el broche de la constelación,
de poetas y escritores que brillan como estrellas
y sus palabras bellas me son la bendición.
y voy poniendo el broche de la constelación,
de poetas y escritores que brillan como estrellas
y sus palabras bellas me son la bendición.
La noche es el momento de amar y relajarse,
poder comunicarse con la mujer ideal,
cuando alto es el cariño como gigante el cielo
donde una estrella besa al cometa celestial.
poder comunicarse con la mujer ideal,
cuando alto es el cariño como gigante el cielo
donde una estrella besa al cometa celestial.
Yo tengo vida propia debajo en la laguna,
fulgura por fortuna la luna sobre el mar,
yo soy las buenas noches del niño que en la cuna
su madre en paz acuna la calma de un hogar.
fulgura por fortuna la luna sobre el mar,
yo soy las buenas noches del niño que en la cuna
su madre en paz acuna la calma de un hogar.
DÍA I (Pietro Igarza – Perú)
Fortuna, Rubén Sada, de ser la luz del día
y ver entre los rostros la dicha palpitante;
fortuna es el estar brindando al buen amante
reposo en las praderas lejos de la apatía.
y ver entre los rostros la dicha palpitante;
fortuna es el estar brindando al buen amante
reposo en las praderas lejos de la apatía.
Fortuna es el rayar el alba en armonía
viendo a los tomeguines bajo el cielo gigante,
fortuna es el amar sin lujo ni besante,
solo sintiendo el sol ardiendo en nuestra vía.
viendo a los tomeguines bajo el cielo gigante,
fortuna es el amar sin lujo ni besante,
solo sintiendo el sol ardiendo en nuestra vía.
¡Qué bello el rosicler!¡Qué bella es la mirada
del cielo y de sus nubes!¡Qué bellos los gorriones!
¡Qué bella es la niñez!¡Qué bella que es la nada!
del cielo y de sus nubes!¡Qué bellos los gorriones!
¡Qué bella es la niñez!¡Qué bella que es la nada!
¡Qué bellos los fulgores!¡Qué bellas tentaciones
de ser eterno día al verme en la alborada!
¡Qué bellas!¡Oh!¡Qué bellas!¡Qué bellas atracciones!
de ser eterno día al verme en la alborada!
¡Qué bellas!¡Oh!¡Qué bellas!¡Qué bellas atracciones!
NOCHE II (Rubén Sada – Arg)
Yo vivo entre penumbras con un reflejo onírico,
inspiro el canto lírico del grillo en el manglar,
yo pinto al sol de rojo y en ese cuadro empírico
con asalto vampírico lo llego a desangrar.
inspiro el canto lírico del grillo en el manglar,
yo pinto al sol de rojo y en ese cuadro empírico
con asalto vampírico lo llego a desangrar.
Sus sueños los mortales, a mí los han debido
y al descansar sin ruido descansa su testuz,
la hormiga es una industria, la lechuza y el búho
festejarán su boda con bichitos de luz.
y al descansar sin ruido descansa su testuz,
la hormiga es una industria, la lechuza y el búho
festejarán su boda con bichitos de luz.
Las sombras son espejos de formas curvilíneas
y el campo y sus gramíneas loan al sembrador.
La cósmica excelencia de un cielo tachonado
de estrellas por millones elogian al Creador.
y el campo y sus gramíneas loan al sembrador.
La cósmica excelencia de un cielo tachonado
de estrellas por millones elogian al Creador.
De noche se ve todo con otra perspectiva,
la luz que es tan altiva muere en profundidad,
sembrada la semilla también vive en la oscura
y aunque la tierra es dura, se entrega con bondad.
la luz que es tan altiva muere en profundidad,
sembrada la semilla también vive en la oscura
y aunque la tierra es dura, se entrega con bondad.
DÍA II -El campesino- (Pietro Igarza – Perú)
Y aunque la tierra es dura se entrega con bondad
en hombros campesinos que van a junto a la yunta
cargado de condenas, sudores y pregunta:
¿qué vida estoy pagando?¿por qué tanta maldad?
en hombros campesinos que van a junto a la yunta
cargado de condenas, sudores y pregunta:
¿qué vida estoy pagando?¿por qué tanta maldad?
En manos tengo un huérfano grito de soledad,
mis labios, ya resecos, buscan en la difunta
hora algún pan bañado, bañado en la presunta
repartición del hombre sin tanta vanidad.
mis labios, ya resecos, buscan en la difunta
hora algún pan bañado, bañado en la presunta
repartición del hombre sin tanta vanidad.
Mas sigue el campesino arrastrando cadenas
por eones y eones heredando a sus críos
sus temores, sus llantos, su ansiedad y sus penas.
por eones y eones heredando a sus críos
sus temores, sus llantos, su ansiedad y sus penas.
Mas siguen sus luceros haciendo, en tierra, ríos,
ríos de desconsuelo que fluyen por las venas
y mueren al bombear los sufrimientos fríos.
ríos de desconsuelo que fluyen por las venas
y mueren al bombear los sufrimientos fríos.