MARTÍN FIERRO LIBERTARIO
Ser payador es mi anhelo
de libertario calibre,
“mi gloria es vivir tan libre,
como pájaro en el cielo.
No hago nido en este suelo,
ande hay tanto que sufrir”,
y al mundo habré de advertir
que si vuelvo a caer bajo,
remontaré desde abajo
con alas del porvenir.
El verso que más me asombre
será el que impulse al progreso,
y nunca olvido, confieso,
un consejo de renombre:
“Debe trabajar el hombre
para ganarse su pan,
pues la miseria, en su afán
de perseguir, de mil modos,
llama en la puerta de todos
y entra en la del haragán”.
El poder que tiene un báculo
de rapacidad voraz,
le hace mascar el agraz
al pueblo en vil espectáculo.
Venenoso es el tentáculo
que comete esta traición,
“pero el hombre de razón
no roba jamás un cobre,
pues no es vergüenza ser pobre
y es vergüenza ser ladrón”.
“Y he de decir ansí mismo”
que aunque su poder se agrande,
la patria se lo demande
en las fauces del abismo.
“Que no tiene patriotismo
quien no cuida al compatriota”
que aun con un ala rota
el águila se alzará,
sus carroñas comerá
hasta la última gota.
No es mi amigo el cachafaz
que profana a la justicia,
su meretriz impudicia
mintió acerca de la paz.
“Al que es amigo, jamás
lo dejen en la estacada,
pero no le pidan nada
ni lo aguarden todo de él,
siempre el amigo más fiel
es una conducta honrada”.
Y hoy confinados seguimos,
aguantando la mordaza,
la ceniza será brasa
de la cual, Fénix, surgimos.
“De los males que sufrimos
hablan mucho los puebleros,
pero hacen como los teros
para esconder sus niditos:
En un lao pegan los gritos
y en otro tienen los güevos”.
© Rubén Sada. 15/06/2020.
NOTA: Las citas en cursiva pertenecen al Martín Fierro de José Hernández.