DESAGRAVIO AL CACHIVACHE
Cachivache, te vindico,
porque por algo naciste,
y aunque algunos te calumnien
yo te voy a vitorear.
Ya que tú fuiste el inicio,
provisorio pero útil
¿y ahora dicen que sos fútil?
¡Vos ayudaste a empezar!
Fuiste el gen, el mal diseño,
el ingreso al prototipo
pero de ti no rezongo
por ser el primer umbral.
Despreciado cachivache,
hasta el tango “Cambalache”
fue un presagio de tus formas,
mezcolanzas de un final.
Tu desorden, tu anarquía
contaminados de ripio,
son el caos del principio
en que explosiona el ‘big-ban’.
Pero al final, poesía
borronea tus ideas
que iluminan con mil teas
que la vuelta al mundo dan.
Mamotreto, chirimbolo,
sos precario, tosco y bruto,
no alcanza el abecedario
por lo incómodo que sos.
Te enmoheces, te abandonan
el tiempo y sus artimañas,
pero aquí te reivindico,
quiero ser tu portavoz.
Armatoste que reposas
a un costado de la vida,
resignado al sufrimiento
de tu temor a morir.
Así, igual, la piedra sufre
cuando el escultor la talla,
pero su cincel no calla
y otra Venus va a vivir.
Cachivache que el pasado
fue oxidando en la desgracia,
y que aguarda en el cadalso
su ejecución terminal.
Justiprecio tu prontuario
pero no armes ‘cachengue’,
nunca habrá ‘merequetengue’,
¡yo valoro tu historial!
¿Por qué todos te desprecian,
llamándote cachivache?
¡Si hasta en un profundo
bache puede crecer una flor!
Todo átomo recicla
y el universo es un ciclo,
tras la noche más oscura
siempre renace el albor.
Cachivache, te vindico,
yo te aprecio y reivindico,
sos mi amigo, sos mi ejemplo,
no me animo a ser tu juez.
Porque estoy entre millones
tildados de "Cachivaches",
buscando que no me tache
la soberbia y la altivez.
Rubén Sada. 10/07/2018.