MADRE MÍA
Es difícil hacer lo que tú hiciste, es difícil lograr lo que lograste.
La casa está como tú la dejaste,
no produjo más de lo que produjiste.
Está todo tan áspero, tan triste,
necesita de tu amor y tu coraje.
Tampoco ha reverdecido el paisaje
desde el instante en que te nos fuiste.
Y cuando más quiero estar a tu lado
es que me invade un sentimiento raro
que me hace pensar en ti cada día.
Y al tratar de imitar tu gran amor
me sale todo el cariño y gran valor
que me impulsan a elogiarte, madre mía.
© Rubén Sada, 16-05-1978,
al cumplirse 1 año del fallecimiento de mi madre.