LA LUCHA INTERIOR
"Mientras el corazón y la cabeza
batallando prosigan, [...] ¡habrá poesía!
(Gustavo Adolfo Bécquer - Rima IV)
Dos seres viven en mí
dos seres muy contrapuestos,
los dos luchan entre sí
por lo que creen correcto.
Uno hace lo que deseo,
el otro se abstiene de hacerlo,
los dos luchan entre ellos
por quedarse con mi alma y cuerpo.
A uno lo manda mi mente
y hace lo que le ordeno,
el otro rige a mi corazón
y reprime lo que siento.
Uno es hipócrita y falso,
el otro es veraz, sincero,
uno es agresivo y malo
el otro es pacífico y bueno.
Uno anda libremente
el otro es preso del miedo,
uno es blando como el pan
el otro tiene alma de acero.
Uno sabe adónde voy
el otro camina incierto,
el primero te habla de amor
el otro quiere tu cuerpo.
Uno llora en tu regazo,
el otro te escribe versos,
uno siempre te lastima,
el otro será tu remedio.
Uno es amigo del mal,
el otro es buen consejero.
Dime a cuál de ellos quieres
porque ni yo lo entiendo.
Es una lucha interior
por hacer lo que es correcto,
los dos luchan entre ellos
por quedarse con mi alma y cuerpo.
A ninguno puedo echar,
los dos viven en mi adentro.
Los dos luchan entre ellos.
Los dos luchan, y yo, en el medio.
dos seres muy contrapuestos,
los dos luchan entre sí
por lo que creen correcto.
Uno hace lo que deseo,
el otro se abstiene de hacerlo,
los dos luchan entre ellos
por quedarse con mi alma y cuerpo.
A uno lo manda mi mente
y hace lo que le ordeno,
el otro rige a mi corazón
y reprime lo que siento.
Uno es hipócrita y falso,
el otro es veraz, sincero,
uno es agresivo y malo
el otro es pacífico y bueno.
Uno anda libremente
el otro es preso del miedo,
uno es blando como el pan
el otro tiene alma de acero.
Uno sabe adónde voy
el otro camina incierto,
el primero te habla de amor
el otro quiere tu cuerpo.
Uno llora en tu regazo,
el otro te escribe versos,
uno siempre te lastima,
el otro será tu remedio.
Uno es amigo del mal,
el otro es buen consejero.
Dime a cuál de ellos quieres
porque ni yo lo entiendo.
Es una lucha interior
por hacer lo que es correcto,
los dos luchan entre ellos
por quedarse con mi alma y cuerpo.
A ninguno puedo echar,
los dos viven en mi adentro.
Los dos luchan entre ellos.
Los dos luchan, y yo, en el medio.
© Rubén Sada. 27-12-2006.