BESO

Sos mi consorte, mi dueña,
mi prienda, mi bien amada,
sos la dulce enamorada
con la que mi sueño sueña.
Sos la princesa sureña
con la que en días reboso,
pero en las noches sollozo
anhelando tus marfiles
para besarlos, gentiles
con un beso milagroso.

 
Tarda el verano en invierno
y el otoño en primavera,
tarda en madurar la era
y en jaula el tiempo es eterno.
Nueve meses el materno
vientre el tierno fruto aguarda,
espera el humo a que arda
copiando al sol de la tarde,
y es tanta pasión la que arde
que ya mi boca no tarda.

Si besarte es un pecado
que me hiciera sentir culpa,
beberé toda la pulpa
del fruto acaramelado.
¿Quién me quita lo bailado?
Si la vida en un bostezo
que necesita aderezo
y en tus labios hay sabor
que me tornó en pecador
por culpa del primer beso.

© Rubén Sada. 2-10-2019.