FE EJEMPLAR
"La fe mueve montañas, pero no se puede mover montañas
sin antes cargar un poco de tierra".
Prepáranse
la abuela con su nieta
con
sendas bolsas de migas de pan,
para
darle alimento a las palomas
que
en el alba volando vienen, van.
—Abuelita,
las palomas no bajan,
abuelita,
las palomas no están.
—Les
tiraremos, hija, estas migajas,
que
a buscarlas, de seguro, vendrán.
—Abuela,
las palomas ¿dónde han ido?
No
las veo. Ellas ¿dónde estarán?
—Algunas
han salido de sus nidos
donde
hay polluelos para alimentar.
—Arroja
aquí el manjar, en este césped,
y
cuando ellas terminen su volar
seguro
avistarán estas miguitas,
¡Da
por cierto que las encontrarán!
—No
siempre el resultado está a la vista,
y
aunque no lo veamos, da esperar,
y
con fe, seguir siendo optimista:
con
confianza, ¡seguro ocurrirá!
Las
dos bolsas de migas ya acabaron,
mas,
no acaban las aves de volar.
Quedó
un blanco maná en el verde pasto
y
una niña esperando en soledad.
Cansada
de algo que supuso vano
la
pequeña se alejó, para jugar,
pero
luego volvió, en pocos minutos,
y
ya no estaban las migas del pan.
©Rubén Sada – 09-11-2012