Se lo dictan con destreza desde el mar, diez mil delfines, canta un trovo con belleza escuchando a querubines *y voces en su cabeza.* Se escucha hasta en la nobleza el trovo de paladines, lo canta el juez y la jueza secundado por violines *y voces en su cabeza.* Se libera la pureza del trovo de la Alpujarra, acompañan la proeza la oquedad de la guitarra *y voces en su cabeza.*
Se evaporó la existencia en el éter de un suspiro, se desintegró el papiro de la piel con inclemencia. La fiesta perdió su esencia, sus luces y fantasía, enmudeciendo a la encía de la poesía alada, *los regalos no son nada* *ante una silla vacía.*
Terminaron los festejos en un fuego de artificio, como se esfuma el solsticio del día y sus mil reflejos. Entre ímpetus bermejos una musa y su galán, el tiempo se beberán evaporando su esencia, *un amor de efervescencia* *en la copa de champán.*
SINOPSIS: La canción "Regreso al Paraíso" de Rubén Sada y Mauricio Sánchez Campos parece ser una reflexión sobre el estado actual del mundo o de un lugar específico, que se describe como un "paraíso" que ha sido dañado por el "delito". La tierra eterna o este paraíso está "clamando a grito" y la era del granito podría ser una referencia a la proliferación de grandes metrópolis de cemento. La "sangre" que se "derrama" en este lugar, sugiere que hay una herida abierta y que hay un sufrimiento que debe cicatrizar. La "siembra del labriego" que se "agudiza" puede ser una metáfora para describir el aumento de la actividad humana y la intensificación de la producción agrícola en masa, que podría estar contribuyendo al daño del paraíso. Los "guerreros de las nubes" que "siembran calma" son una imagen poética que representa a personas o fuerzas positivas que están trabajando para restaurar la paz y la armonía en el paraíso. La "fotosíntesis del alma" es una metáfora para describir el proceso de transformación y renacimiento que está teniendo lugar en el paraíso.
En general, la canción parece estar hablando de una búsqueda de comprensión y de un deseo de volver a un estado de armonía y equilibrio en el planeta. La letra sugiere que la tierra eterna está clamando y que se están tomando medidas para restaurar la paz y el equilibrio en el paraíso.
Sócrates al presidente: —Señor, salga de su cáscara, quítese esa falsa máscara que lo aleja de la gente. ¡Hable con el indigente cuyo futuro es betún! Y si no lo ha hecho aún, trate de entender su ciencia, pues contagia inteligencia hablar con gente común.
—Doctorados por la vida con un sinfín de experiencias, sus diplomas son vivencias de cada etapa vivida. ¡Sufrieron golpes, caída, y kilómetros de ayes! Se arrastraron en mil valles mas, dispuestos a escalar ¡hoy lo quieren ayudar! ¡Son los sabios de las calles!
—Son filósofos, sofistas, son poetas, pensadores, son estudiosos, cultores de secretos repentistas. Tienen sueños idealistas que, con lujo de detalles les evitan tristes ayes y los ponen a soñar... ¡Usted debe consultar con los sabios de las calles!
—Contemplativos del cielo nunca olvidan que sus pies caminaron la niñez descalzos en rudo suelo. Pero emigran en un vuelo con alas de grandes talles, águilas sobre mil valles esquivando al muladar, ¡sé que lo van a ayudar! Son los sabios de las calles.
—Siempre dicen la verdad y del sistema son críticos, no mienten como políticos que rifan su dignidad. Viven con austeridad y el cantar su gloria labra, y aunque la muerte macabra les imponga un cepo cruel, siguen en la senda fiel de la luz de la palabra.
—Con la prédica profunda que en la décima medita, cada rapsodia levita sobre una pasión fecunda. Aun con copla vagabunda no permitirán que acalles, te conviene que los halles y ellos te van a explicar: ¡Busca! Los vas a encontrar: ¡Son los sabios de las calles!