EL ÁRBOL DE LA VIDA
Comamos, amor, del árbol de la vida,
y hagamos de la Tierra una morada.
Sus frutas maduras ya están servidas,
la vida eterna en el Edén, garantizada.
La existencia se hizo para ser gozada.
El inicuo logró que sea obstruida.
Obstaculizó la muerte descarada,
heredada del primer hombre homicida.
La felicidad ha estado restringida,
la humanidad ha sido abandonada.
Con razón la otra fruta fue prohibida.
No hagas caso a la serpiente despiadada.
La muerte será una mentira escuchada.
La subsistencia, una verdad obedecida.
Tenemos para elegir muchas frutas sanas.
No elijamos justo la que está podrida.
Comamos, amor, del árbol de la vida,
nuestra familia estará consolidada,
nuestra descendencia será la elegida,
y agradecida estará la especie humana.
Nuestra estirpe será la soberana
y a muchos niños daremos bienvenida.
No tengas miedo a morder la manzana,
porque ésta, es la del árbol de la vida.
©
Rubén Sada 2008. 02-03-2008