POR EL TÚNEL DEL OÍDO
por ese microconducto,
se dirigen al reducto
de cerebrales graneros.
Pasan trinos de jilgueros
viendo el sol desde su nido,
la diversión y el sonido
de los niños en la plaza,
toda la vida se pasa
*por el túnel del oído.*
en tránsito al corazón,
emigran del diapasón
y regalan energías.
Chistes, bromas, tonterías
también hacen recorrido,
y aceleran el latido
de mi castigada raza,
yo sé que la vida pasa
*por el túnel del oído.*
del tartufo que gobierna,
soledades de taberna,
batucadas y comparsas.
Pasa el crotorear de garzas
y de búhos su silbido,
del mosquito su zumbido
cuando exige su comida,
yo sé que pasa la vida
*por el túnel del oído.*
Pasan gritos, malos tratos
o un llanto desde la cuna,
y desde techos de luna
lamentaciones de gatos.
Taco aguja en los zapatos
que el carmín ha destruido,
el vocablo corroído
por insultos y amenaza,
yo sé que la vida pasa
*por el túnel del oído.*
buscando un nuevo horizonte,
sierras que causan desmonte
y a los pájaros doblegan.
Alabanzas que congregan
al que a Dios ha conocido,
gritos de gol del partido
con victoria merecida,
yo sé que pasa la vida
*por el túnel del oído.*
pasa el miedo, pasa el odio,
pero hay amor en el podio
de sonidos que él escucha.
Pasa la verdad, ¡y mucha!
Pasa el silencio y el ruido
y como tú, coincido
bajo el sol que nos rodea,
que la vida se pasea
*por el túnel del oído.*