CUÍDATE TAMBIÉN DE ADENTRO
Todo el mundo se cuida del aspecto,
su buen físico, la línea, su silueta.
¡Cuánto mejor es cuidarse del adentro
para llegar saludable a nuestra meta!
Como mujer quieres cintura de avispa,
siempre delgada, bonita y bien coqueta.
Vas siempre al trote, como sacando chispas,
yendo al gimnasio, o a andar en bicicleta.
Con la llegada del verano importa el vientre,
y si eres hombre quieres físico de atleta,
y unos músculos como los de Schwarzenegger
que muchas damas te anoten en libreta.
Mas, de cuidar el espíritu ni se habla,
sólo se habla de adelgazo y de la dieta.
Sólo importa si tu panza es una tabla.
La escasa espiritualidad nunca se objeta.
El sentimiento parece que no importa,
incumbe más lo corpóreo y la faceta.
Pero cuidar nuestro sentir nos reconforta,
y hace mucho más liviana esta maleta.
Así será menos pesado nuestro viaje,
encontraremos el rumbo en nuestra veta.
Lo de afuera se estropea, es como un traje,
lo que vale es lo de atrás de la careta.
No te preocupes tanto por tu físico,
por cómo te ven o te etiquetan.
Cuídate más de adentro, y que tu espíritu
atesore siempre así salud completa.
Autor: RUBÉN SADA, 04-01-2009