"El miedo solo sirve para perderlo todo" (Gral Manuel Belgrano)
Te
inocularon el miedo
con el hambre y la paliza,
y hoy el miedo paraliza
tu coraje y tu denuedo.
Dijo el poeta Quevedo
que al miedoso lo ha vencido
su propio miedo adquirido.
¡Qué tremenda paradoja
cuando al tornillo lo afloja
el miedo a un desconocido!
Te estafaron diez mil veces
y otras mil más te mintieron,
te empujaron y te hundieron
a un pozo ciego con heces.
Has padecido escaseces
y penurias has sufrido
cuando el barco te han hundido
en el fondo de un pantano...
¡No tengas más miedo, hermano,
miedo a lo desconocido!
Viste a la muerte tan cerca
que ha pasado al lado tuyo,
convirtieron en murmullo
la queja de tu voz terca.
A tu garganta una cerca
de púas la ha herido,
no te permite un gruñido
quien te apunta con el dedo…
¡No puedes tener más miedo,
miedo a lo desconocido!
Conociste en el dossier
la intolerancia y el odio,
y hoy te han ascendido al podio
que te incita a no creer.
Te obligaron a comer
puro pescado podrido,
por eso, hermano, yo pido
que la fuerza te acompañe
y no dejes que te engañe
el miedo a un desconocido!
Al que le robaron todo
y no tiene amanecer,
no tiene más por perder
ni de entristecerse modo.
Pues de aquel polvo este lodo,
que eliges por conocido,
y lo tienes asumido:
te robaron tanta vida,
¡que el miedo ya no te anida,
miedo a lo desconocido!
Solitario un cuarto oscuro
te abre unos brazos de luz,
y pone venda en la pus
del pasado hacia el futuro.
Un asunto sí es seguro:
Hay un camino florido
y perdido por perdido
cambias miedo en esperanza,
¡y en tu mente ya no avanza
el miedo a un desconocido!
© Rubén Sada. 16/11/2023.
con el hambre y la paliza,
y hoy el miedo paraliza
tu coraje y tu denuedo.
Dijo el poeta Quevedo
que al miedoso lo ha vencido
su propio miedo adquirido.
¡Qué tremenda paradoja
cuando al tornillo lo afloja
el miedo a un desconocido!
Te estafaron diez mil veces
y otras mil más te mintieron,
te empujaron y te hundieron
a un pozo ciego con heces.
Has padecido escaseces
y penurias has sufrido
cuando el barco te han hundido
en el fondo de un pantano...
¡No tengas más miedo, hermano,
miedo a lo desconocido!
Viste a la muerte tan cerca
que ha pasado al lado tuyo,
convirtieron en murmullo
la queja de tu voz terca.
A tu garganta una cerca
de púas la ha herido,
no te permite un gruñido
quien te apunta con el dedo…
¡No puedes tener más miedo,
miedo a lo desconocido!
Conociste en el dossier
la intolerancia y el odio,
y hoy te han ascendido al podio
que te incita a no creer.
Te obligaron a comer
puro pescado podrido,
por eso, hermano, yo pido
que la fuerza te acompañe
y no dejes que te engañe
el miedo a un desconocido!
Al que le robaron todo
y no tiene amanecer,
no tiene más por perder
ni de entristecerse modo.
Pues de aquel polvo este lodo,
que eliges por conocido,
y lo tienes asumido:
te robaron tanta vida,
¡que el miedo ya no te anida,
miedo a lo desconocido!
Solitario un cuarto oscuro
te abre unos brazos de luz,
y pone venda en la pus
del pasado hacia el futuro.
Un asunto sí es seguro:
Hay un camino florido
y perdido por perdido
cambias miedo en esperanza,
¡y en tu mente ya no avanza
el miedo a un desconocido!
© Rubén Sada. 16/11/2023.