INVENTO BIEN INVENTADO
“El libro es fuerza, es valor,
es poder, es alimento;
antorcha del pensamiento
y manantial del amor.
El libro es llama, es ardor,
es sublimidad, consuelo,
fuente de vigor y celo,
que en sí condensa y encierra
lo que hay de grande en la tierra,
lo que hay de hermoso en el cielo”.
—Rubén Darío (1867-1916)
[intro]
Lo multiplica la imprenta
como a estrellas infinitas,
prende chispas, burbujitas,
en la mente soñolienta.
La razón pobre, alimenta,
prende en mi espíritu el fuego,
cuando avanzo entre su pliego
me emociono, gozo y vibro...
Señores, hablo del LIBRO:
¡El ojo de un mundo ciego!
[1]
Bajó de un alto eucalipto
y se acostó entre tus manos,
lo extendían los romanos
y enrollaban en Egipto.
Por haber sido proscripto,
mutó mucho en sus mil formas,
resistió grandes reformas,
de tablas de arcilla a bites,
y aunque estuvo en escondites
fue tea en las plataformas.
[2]
Poesía, cuento, prosa
en pieles o cueros finos
y lo escribieron los chinos
en su seda milagrosa.
Fue la inquietud siempre ansiosa
que al hombre empuja a aprender,
de la ciencia del saber
que la vida es una noria,
testimonio de la historia,
la experiencia del ayer.
[ESTRIBILLO]
Lo multiplica la imprenta
como a estrellas infinitas,
prende chispas, burbujitas,
en la mente soñolienta.
La razón pobre, alimenta,
prende en mi espíritu el fuego,
cuando avanzo entre su pliego
me emociono, gozo y vibro,
señores, hablo del LIBRO:
¡el ojo de un mundo ciego!
[3]
Él ilumina, da lumen,
no se amedrenta ni mengua,
es príncipe de la lengua,
nos inspira, es nuestro numen.
Sabiduría en volumen,
te dará sus enseñanzas,
si lees y no te cansas
harás culto del saber,
y al leer y comprender
te darás cuenta que avanzas.
[4]
Un terremoto en la mente,
el libro provoca un sismo,
te hace pensar por ti mismo
poniendo a tu vista un lente.
Derrumba al dogma que miente,
al decir verdad, fue odiado,
idolatrado o quemado,
nos dio comunicación,
le doy condecoración
de: "Invento bien inventado".
[ESTRIBILLO]
Lo multiplica la imprenta
como a estrellas infinitas,
prende chispas, burbujitas,
en la mente soñolienta.
La razón pobre, alimenta,
prende en mi espíritu el fuego,
cuando avanzo entre su pliego
me emociono, gozo y vibro,
señores, hablo del LIBRO:
¡el ojo de un mundo ciego!
(BIS)
23 de abril, día mundial del libro.