Consigna: Homenaje y reconocimientos a autores.
A JOSÉ LARRALDE
Vaya mi canto
a un cantor
que no habló
jamás en balde,
vaya al gran
José Larralde
mi homenaje
payador.
Siempre cantó
con valor,
la verdad aunque
fuera dura,
ni ante la
peor dictadura
quedó por
miedo callado,
es amado y es
odiado,
es poeta,
genio y figura.
La verdad es
la verdad
aún si el
pueblo la calla,
con un
silencio canalla
cómplice de
impunidad.
Plasmar la
sinceridad
en canciones
de denuncia,
una nueva
aurora anuncia,
la patria
libre de engaños,
que aún al
pasar los años
nuestro cantor
no renuncia.
Nacido en su
Huanguelén,
en mil nueve
treinta y siete,
abrió la pampa
a machete
y allí trabajó
también.
Conoció el
esfuerzo, quien
fuera humilde
y perfil bajo,
su valor fue
su trabajo
y la poesía le
sobra,
su maravillosa
obra
satisfacciones
le trajo.
Milonga y
canto surero
de un payador
perseguido,
molesta a
algunos oídos
su canto de fusta
y cuero.
Defendió
siempre al obrero
"amansando
soledades",
labró muchas
amistades
por ejemplo
con Cafrune,
y el ideal que
los une
resiste las
tempestades.
Él fue peón
golondrina
resistiendo
más que el caucho,
su
"herencia pa' un hijo gaucho"
es un trigal
que germina.
Su verdad se
arremolina
en el tiempo
de la siega,
porque el
cobro nunca llega,
y hace sus
versos audibles
es payador
invencible
en la voz de
Santos Vega.
Él no es jamás
neutral
ante la cruda
injusticia,
cada canción
es propicia
para sojuzgar
al mal.
Su canto gaucho
es un pial
que aúna el
grito del pobre
con su lágrima
salobre
y en fantástica
derrota
cada una de
sus notas
hacen que el
bien se recobre.
Y va mi
homenaje así...
para este cantautor
mítico,
que desde su
verso crítico
a la verdad
dice SÍ.
Tenerlo aún
hoy aquí
me hace pensar,
¡qué olvidado
se halla el
cantor desolado,
y cuántas
penas afronta!
"El
Pampa" dejó su impronta
en mi humilde
recitado.