Mostrando las entradas con la etiqueta DESAMPARO. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta DESAMPARO. Mostrar todas las entradas

22 de marzo de 2008

NO ME DIGAS MÁS QUE NO


NO ME DIGAS MÁS QUE 'NO'


Estoy ya hasta el hartazgo
de que me digas que no.
Cansado de tu desgano,
tu desprecio y desamor.

A ninguna otra yo miro,
y a todas digo que no.
Sólo me siento contigo,
dime que sí, por favor.

¿Sabes cuántas existen
que me dirían que sí?
Y a todas yo se lo niego,
todo lo hago por ti.

No me digas que no a mí,
mejor díselo a Arjona.
Yo así no puedo vivir,
no me lo digas ni en broma.

Dile que no al cigarrillo,
dile que no al alcohol,
dile que no a la violencia,
pero a mí no me digas no.

¿Acaso no percibiste
cuánto mi alma te amó?
¿Acaso nunca escuchaste
cuando mi corazón te llamó?

No acepto más negativas,
me iré, si se fue el amor.
Pero si aún queda algo,
no me digas más que no.


© Rubén Sada 22-03-2008

5 de diciembre de 2007

PERRITO FALDERO

crisis de pareja, peleas, maltrato, violencia de género


PERRITO FALDERO

"Si soy el perro de tu señorío
no me dejes perder lo que he ganado"

(Del "Soneto de la dulce queja", de Federico García Lorca"

Siempre te fui fiel como perro al dueño.
Fueron preceptos para mí, tus deseos...
toda la vida tratando de complacerlos.
A tus delicados caprichos fui oyendo.
No me separaba de ti, ni por momentos.

Cuando me hablabas mi oído estaba presto,
y tus órdenes fui obedeciendo.
Viví tratando de parecerme a un hombre, sin serlo.
Adonde ibas yo te estaba persiguiendo,
comportándome como tu perrito faldero.

Este maltrato que hoy me das no lo merezco.
Y aguanto golpes hasta quedar sin aliento.
Quizás pensabas que mi amor era pequeño.
Menos mal que hoy despierto de este sueño.
Ya me cansé de ser tratado como un perro.

La sociedad no ve lo que estoy sufriendo.
Tal vez por fuera me vean duro como el hierro.
Hablan de la mujer golpeada y lo entiendo
porque aunque soy hombre lo estoy viviendo,
por eso es que jamás me gustó el boxeo.

Pero ¡basta! Ya me harté, ¡soy nuevo!
Adentro mío un hombre está naciendo.
Uno que tiene cariño y sentimientos.
Uno que moja con lágrimas su pañuelo.
Uno que no aguantará más este tormento.

¡Basta! Ya me harté, ¡soy nuevo!
Porque desde ahora seré un halcón en vuelo.
Búscate otro can a quien tirarle un hueso.
A partir de ahora seré un lobo en celo.
Cambiaste al perro por un lobo hambriento.


Dedicado al hombre maltratado psicológicamente por la mujer. 
★☆★☆★☆★☆★☆★☆★☆★☆★☆★☆★☆★
©Rubén Sada. 05-12-2007 
★☆★☆★☆★☆★☆★☆★☆★☆★☆★☆★☆★

26 de mayo de 2007

UN DOMINGO SIN TI



UN DOMINGO SIN TI



Un domingo sin ti es una opaca luna,
la noche sin tu amor se me nubla;
y hasta la luna parece que se apaga:
la niebla la tapa y avanza la bruma.

Un domingo sin ti es un brazo cansado,
una mano fría, por el frío pálida,
que necesita de la mano cálida
de un amor como tú, a su lado.

Es como una incógnita sin respuesta
no tener a quién decir lindas palabras,
semana larga que sin dulce se amarga,
para esforzarse en creer lo que cuesta.

Un domingo sin ti es un vacío puerto
agitado en soledad, fría y helada.
Un domingo mi alma ha quedado devastada
vacía y sola en medio del desierto.

Amor, ¡vuelve! para continuar este camino...
Cariño mío ¿hasta cuándo te has ido?
No sabré cómo atravesar este castigo...

La soledad me invade este domingo...
pues no hay nadie que quiera estar conmigo...

y tú no estás.


© Rubén Sada - 28 de junio de 1981

11 de mayo de 2007

EL LABERINTO


EL LABERINTO

No encuentro la salida de este laberinto,
no sé adónde ir, solo sigo mi instinto.
Si tú sabes salir, mejor te sigo
o sino que alguien me muestre el camino.

No encuentro la salida de este laberinto,
se hace muy complicado el mecanismo,
sigo al pie de la letra el ejercicio
mas no puedo resolver tanto conflicto.

No conozco un atajo que me acorte el camino,
no entiendo una razón que me explique lo que vivo.
No encuentro el método para evadir este destino,
ya ni sé quién soy, ni entiendo por qué existo.

Nadie escucha mi ruego, no se oye mi grito,
no puedo orientarme, ya estoy perdido,
y en vez de ver la salida, solo giro, y giro,
en el mismo centro de este laberinto.

No encuentro el cartel que me advierta del peligro,
no tengo a nadie que me ofrezca un incentivo,
de lo que quiero conseguir nada consigo.
El camino es oscuro, tampoco lo ilumino.

Estoy como muerto aunque estoy vivo,
no me deja pensar en paz el nerviosismo,
y en lugar de calma, terrible sismo,
y en mi interior, antes fogoso, ahora hace frío.

No encuentro la salida de este laberinto:
no me puedo curar de ser de ti un adicto,
ni consigo el remedio para mi corazón herido.
De quien antes recibía amor ahora ni tengo cariño.

© Rubén Sada. 07-01-2007.

Con tu visita yo vibro./ Tu regalo apreciaré,/y te obsequiaré mi libro/ si me invitas un café.

Invitame un café en cafecito.app