17 de junio de 2013

¡SOPORTA, QUERIDA PATRIA!

personajes nefastos, ladrones, delincuentes, antipatrias, traidores a la patria


¡SOPORTA, QUERIDA PATRIA!



Derrotaste a los ingleses en el Río de la Plata,

y venciste al invasor, con tu santo de la espada.
Consignaste al dictador al sillón de Rivadavia,
y hasta un brujo y traidor, ocupó importante banca.

Soportaste muchas mermas y una guerra en desventaja,

hoy te noto media enferma, complicada y cabizbaja.
Tu laureada libertad se está vendiendo por plata,
mientras tu soberanía de a poco se viene en baja.

Te pido que aguantes, patria, con hidalguía y audacia,

que el enemigo está aquí, aun viviendo en democracia.
No olvides que hay muchos hijos que todavía te aman.
Resiste, soporta, patria, al que te causa desgracias.

Soporta con fortaleza el saqueo de tus montañas.

Soporta con gallardía tanta erosión en tus pampas.
Soporta asfixias agrarias, verdes bosques que se talan,
te pido patria que aguantes la siembra de yerbas malas.

Soporta la no justicia, in-seguridad nefasta,

soporta cárceles llenas, de pobres abarrotadas,
gestando más delincuentes, vendiendo inicuas sustancias,
mientras narcoterroristas son los libres porque pagan.

A los ricos extranjeros que por un dólar la hectárea

consiguieron de remate montes, ríos, lagos, agua,
y hoy festejan en mansiones las decisiones compradas
de corruptos funcionarios de vocación vendepatria.

Que no resistieron nunca meter la mano en la lata,

mientras fabricaban villas con casillas hacinadas,
mientras cerraban industrias o a Brasil las trasladaban,
exterminando el trabajo porque el dinero manda.

¡Resiste, nación amada, del ave rapaz sus garras!

Y ruega que la feroz rapiña detenga el águila.
Aunque el desfalco sea atroz, y la depredación, táctica,
no te rindas por vencida ni te pienses como esclava.

¡Soporta, patria querida, que no destruyan tus ganas!

Mientras un juglar se halle en tus calles con palabras,
mientras no calle el poeta y saeta sea su habla,
¡Resiste con fuerza! ¡Aguanta! ¡Soporta, querida patria!

Copyright © Rubén Sada. Publicado en el libro OCTONARIOS, DE RUBÉN SADA