5 de mayo de 2007

CARTA A MI NOVIA (DESDE LA PRISIÓN)


CARTA A MI NOVIA (DESDE LA PRISIÓN)


Magdalena, 28 de Enero de 1982

Buenas tardes, mi amor.
No sabes qué contento me pone ahora tener un rato para escribirte lo mucho que te amo.
-¿Qué sería de mí sin ti?
No sé si podría aguantar lo que estoy viviendo, tal vez sería un desdichado, y muy infeliz. Pero, a pesar de estar encerrado aquí, tú me haces feliz. Porque te tengo a mi lado, aunque no estés. Y ahora que he llegado a conocerte más, sé que me harás muy feliz.

Me gustas, me gusta tu manera de ser, me gusta tu voz cuando me hablas, es como música a mis oídos, y cuando me demuestras tu cariño, me haces volar...

En una sola palabra: me tienes enamorado.

¿Sabes? A mí me encanta la naturaleza. Desgraciadamente aquí dentro no puedo disfrutarla mucho. Pero me gustaría estar en la orilla de un lago tranquilo, o tal vez internado en un frondoso bosque siempreverde con árboles muy altos y flores muy bonitas de todos colores, pero contigo.

Porque si a todo este cuadro no te sumo a vos, todo esto carecería de valor. No tendría sentido. ¿De qué valen las bellezas de la vida si no las disfrutamos juntos? Si no estás en la escena, de nada vale el mejor de los paseos por el lugar más bonito.

Porque cuando te conocí, fue como haber encontrado una perla entre miles de piedras, eras única por tu belleza, no sólo física sino emocional y espiritual, y por eso me enamoré de vos.

Me fascina también tu cabellera, el largo y el color de tu pelo tiene un misterio que me seduce. Es como la noche en esta celda, muy larga y oscura, pero tiene un perfume exquisito que no lo encuentro en esta prisión. El perfume de una mujer bonita.

Cuando me demuestras tu cariño, me impulsas a amarte y a desearte más todavía. Delia, te necesito para vivir. No podría soportar ahora el perderte.
Quiero compartir la vida con vos. Y que seamos felices.

Te amo.

(Escrita a mi novia, Delia Esther -hoy mi esposa- el día 28 de enero de 1982 desde la Prisión Militar de Magdalena, Prov. de Buenos Aires).

Foto superior: El día que nos casamos, 15-10-1982
Delia y Rubén 26 años después, en 2008

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